La prueba es, por regla general, el instrumento más esencial para poder alcanzar la finalidad del proceso, que es la averiguación de la verdad de los hechos controvertidos.
El litigante sabe que un porcentaje importante, por no decir decisivo, para hacer triunfar la pretensión esgrimida en un proceso, depende de la prueba.
El Derecho probatorio se constituye, cada vez más, en un elemento imprescindible para el profesional que ha de defender su tesis en vía judicial, consciente de que sin una demostración meridiana de sus argumentos es muy probable que no logre una resolución judicial favorable a sus pretensiones. Por ello, resulta imprescindible para el profesional contar con una herramienta de ayuda y consulta en materia de prueba.
LA LEY Probática es ese instrumento que aportará a los profesionales jurídicos un conocimiento completo sobre la prueba judicial. La revista abordará temas dogmáticos sobre la prueba, los avances del Derecho probatorio en cada una de las jurisdicciones y temas de probática, a modo de cómo probar los hechos en el proceso.
Frederic Munné Catarina, Abogado, Doctor en Derecho y Secretario de la Asociación de Probática y Derecho Probatorio, con cuya colaboración se edita la revista, dirige esta publicación que cuenta en su Consejo de Redacción con figuras referentes en materia de probática y Derecho probatorio.
En la revista, de periodicidad trimestral, el lector encontrará estudios y opinión sobre temas clásicos de reflexión jurídica sobre la prueba, pero también sobre temas de máxima actualidad relacionados con las nuevas tecnologías, cada vez más determinantes en el mundo probatorio. Además, cuestiones de práctica probatoria, análisis de resoluciones judiciales y estudios jurisprudenciales temáticos, junto a actualidad de interés profesional y experiencias contadas en primera persona.
Con un punto de vista transversal, abordando temas que afectan a las distintas jurisdicciones, y multidisciplinar, con aportaciones y aproximaciones de juristas pero también de otros profesionales intervinientes en la prueba de los hechos, como peritos, ingenieros o detectives. Y siempre con un enfoque claramente orientado a la práctica forense en los Juzgados y tribunales, con el objetivo de resolver dudas al jurista y facilitar su ejercicio profesional
